Cómo aumentar la resina en los cogollos

Si en tu próxima cosecha deseas obtener el máximo rendimiento de tus cogollos y potenciar al máximo la resina de marihuana, sigue leyendo. Existen diversos factores que influyen directamente en el aumento natural de la resina, así como estrategias efectivas para lograr el tan deseado manto blanco de tricomas.

Uno de los elementos más valiosos de la planta de cannabis es precisamente la resina de marihuana, una sustancia que cubre las hojas, los cogollos y las ramas, otorgándoles un característico tono blanquecino.

Los encargados de generar la resina de marihuana en el cannabis son los tricomas. Estas diminutas glándulas actúan como un mecanismo de defensa para la planta, ayudándola a protegerse de la radiación ultravioleta, los insectos y otros factores externos que puedan dañarla. Además, los tricomas desempeñan un papel clave en la polinización, ya que retienen el polen liberado por las plantas macho para fertilizar a las hembras, lo que da lugar a la producción de semillas de marihuana resinosas.

Asimismo, los tricomas almacenan los principales cannabinoides, como el THC, el CBD y el CBG, los cuales son responsables tanto de los efectos psicoactivos como de los beneficios medicinales del cannabis. También generan y conservan los terpenos, compuestos esenciales para el aroma y el sabor característicos de cada variedad de cannabis.

Pero, ¿cómo se puede estimular una mayor producción de resina de marihuana en los cogollos? Desde Buddha Seeds te ofrecemos algunos consejos clave para optimizar la segregación de resina de marihuana en tu cultivo y obtener los mejores resultados.

La resina de marihuana es clave para obtener cogollos potentes y aromáticos. Su producción depende de varios factores como la genética, el ambiente y la nutrición. A continuación, te mostramos las mejores técnicas para aumentar la cantidad de resina en tus cultivos.

Elegir una variedad con alta producción de resina

Algunas genéticas están naturalmente predispuestas a producir más tricomas y resina. Dentro del catálogo de Buddha Seeds, las siguientes variedades destacan por su gran producción de resina de marihuana:

• Buddha White Widow: Una de las cepas de marihuana más resinosas, famosa por su alto contenido en THC y su recubrimiento de tricomas.
• Morpheus: Rica en cannabinoides equilibrados de THC y CBD y con un alto nivel de resina, ideal para extracciones.
• Calamity Jane: Genética autofloreciente de dominancia sativa que produce grandes cantidades de resina.
• Buddha Purple Kush: Sus flores moradas y su densa capa de resina la hacen una de las más atractivas para los cultivadores.
• Kraken: fotodependiente muy potente con cogollos compactos y un nivel de resina sobresaliente.

Si buscas semillas de marihuana resinosas, estas variedades son una excelente elección.

Controlar la temperatura y la humedad

• Temperatura: Reducirla en las últimas 2 semanas de floración a 17°C durante el día y 10-15°C por la noche. Esto genera estrés y fomenta la producción de tricomas.
• Humedad: Mantenerla por debajo del 30% en floración, ya que una humedad baja evita que la resina de marihuana se evapore.

Optimizar la luz

Si cultivas en interior:

• Halogenuros metálicos (MH) para crecimiento.
• Usar luz UV-B en las últimas semanas de floración para estimular la producción de tricomas.
• Vapor de sodio (HPS) para floración.
• LEDs de espectro completo, ya que estimulan la producción de tricomas y son más eficientes.

Usar fertilizantes adecuados

Ricos en fósforo y potasio para maximizar el desarrollo de flores y resina.

Suplementos con azúcares e hidratos de carbono (ejemplo: Top Candy de Top Crop) para mejorar el aroma, sabor y cantidad de resina.

Boosters de floración como Top Bud de Top Crop para aumentar el tamaño de los cogollos y su contenido en resina de marihuana.

Conclusión

Siguiendo estos pasos y eligiendo genéticas altamente resinosas como las de Buddha Seeds, puedes potenciar la producción de resina de marihuana y obtener cogollos con más potencia y mejor calidad. Si buscas marihuana resinosa, la elección de la genética correcta y las condiciones óptimas de cultivo marcarán la diferencia.